lunes, 8 de noviembre de 2010

DERECHOS HUMANOS Y EL MALTRATO INFANTIL EN COLOMBIA


El maltrato viola derechos fundamentales de los niños o niñas y por lo tanto, debe ser detenido, cuanto antes. 

LA VIOLENCIA FAMILIAR EN COLOMBIA. UN CAMINO PARA NUEVOS INTERROGANTES.
UNICEF estima que 2.000.000 de niños y niñas son maltratados anualmente en los hogares colombianos, de los cuales 876.000 lo son en forma severa y extrema. En el 38% de los grupos familiares hay una fuerte presencia del maltrato infantil, de manera especial en las zonas rurales. Pero no solamente los niños y las niñas son protagonistas directos de la violencia familiar, también son espectadores pasivos de la violencia conyugal entre el padre y la madre o entre otros parientes del grupo familiar.
Según consulta de fuentes institucionales para el 2003 en Medicina Legal se reportaron 69.681 casos de violencia intrafamiliar, las cuales incluyen 10.918 por maltrato infantil, 41.320 por violencia conyugal, 17.443 por otros familiares, existen 11.790 dictámenes de casos de abuso sexual de los cuales el 56% corresponde a menores de 14 años.
En el Instituto Colombiano de Bienestar familiar se reconocieron 52.000 niños y niñas bajo protección a causa de alguna forma de maltrato y abuso familiar. Además de lo anterior, se considera que en el país se alcanza una cifra aproximada de 25.000 niños, niñas y jóvenes que circulan por el mercado ilegal de tráfico sexual, 30.000 de estos mismos grupos poblacionales están en la calle y más de millón y medio se consideran trabajadores de alto riesgo.
Además de lo anterior, la situación de las niñas y los niños se constituye en un punto de referencia fundamental en la dinámica de la guerra irregular y el conflicto armado en Colombia. Según información de la Defensoría del Pueblo desde 1997 se denuncio la incorporación perversa de este grupo poblacional, como actores de soporte en las confrontaciones armadas y en abril del 2004 Human Rights anuncio un dato aproximado de 11.000 niños y niñas vinculados ya sea a los actores paraestatales como contra estatales; así mismo, una de las preocupaciones centrales en la agenda institucional tanto del Estado como del Ministerio publico y las agencias internacionales se focaliza en el proceso de desvinculación de los niños y niñas y la atención que se les debe brindar , en un dato cercano a los 7.000 menores.
En esta línea, la familia se consolida como el escenario mas próximo y cercano que garantiza o inhibe las potencialidades de formación humana. Su reconocimiento como experiencia vital por acción o por omisión atraviesa las múltiples nominaciones de las biografías de los actores sociales; es decir, como lo plantean Mary McIntosh y Michel Barret (1992) casi todos los seres humanos nacen en el seno de una familia, y cuando esto no ocurre, el Estado y la sociedad emulan esta experiencia, a través de la institucionalización en espacios de protección.
Bajo esta perspectiva, se considera importante demarcar unas rutas de análisis que intentan establecer la relación entre la violencia familiar y los obstáculos al desarrollo integral de los niños, niñas y jóvenes como integrantes del grupo familiar.
Una de las características que hace compleja la violencia familiar, se relaciona con el sentido y el significado de la convivencia familiar y el cumplimiento de los deberes correspondientes a los diferentes roles que entrelazan a los integrantes de la familia. La presión por la armonía, por la tolerancia y la aceptación de mandato de la unidad familiar aportan elementos que soportan el ciclo de la violencia: tensión, explosión, minimización a través de restarle importancia, perdón y olvido y promesa de no repetirlo; corresponden a un temporalidad que se entrelaza con una secuencia de serenidad, para dar paso a un nuevo ciclo.

DERECHOS DEL NIÑO
Como punto de partida y teniendo en cuenta que la infancia es uno de los colectivos más vulnerables, es necesario considerar al niño no como un objeto de protección sino, como un sujeto de los siguientes derechos:
1.- Derecho a la igualdad, sin distinción de raza, credo o nacionalidad.
2.- Derecho a una protección especial para su desarrollo físico, mental y social en condiciones de libertad y dignidad.
3.- Derecho a un nombre y a una nacionalidad.
4.- Derecho a una alimentación, vivienda y atención médica adecuadas para el niño y para la madre.
5.- Derecho a una educación y cuidados especiales para el niño, física o mentalmente disminuido.
6.- Derecho a crecer al amparo y bajo la responsabilidad de sus padres y en todo caso en un ambiente de afecto y seguridad moral y material. La sociedad y las autoridades públicas tendrán la obligación de cuidar especialmente a los niños sin familia o sin medios de subsistencia.
7.- Derecho a recibir una educación y a disfrutar de sus juegos.
8.- Derecho a estar en todas las circunstancias entre los primeros que reciben protección y socorro.
9.- Derecho a ser protegido contra toda forma de abandono, crueldad y explotación. No debe permitirse que trabaje antes de una edad mínima adecuada.
10.- Derecho a formarse en un espíritu de solidaridad, comprensión, amistad y justicia entre los pueblos.
Todo esto se realiza considerando que el niño debe estar plenamente preparado para una vida independiente en sociedad y ser educado en el espíritu de los ideales proclamados en la Carta de las Naciones Unidas y, en particular, en un espíritu de paz, dignidad, tolerancia, libertad, igualdad y solidaridad. “Teniendo presente que la necesidad de proporcionar al niño una protección especial ha sido enunciada en la Declaración de Ginebra de 1924 sobre los Derechos del Niño y en la Declaración de los Derechos del Niño adoptada por la Asamblea General el 20 de noviembre de 1959, y reconocida en la Declaración Universal de Derechos Humanos, en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (en particular, en los artículos 23 y 24), en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (en particular, en el artículo 10) y en los estatutos e instrumentos pertinentes de los organismos especializados y de las organizaciones internacionales que se interesan en el bienestar del niño".

Ley de Infancia y adolescencia:

Los menores víctimas de abusos sexuales y maltrato familiar tendrán toda la protección del Estado y para garantizar la restitución de sus derechos e integridad serán asistidos por una unidad especial de defensa familiar que estará compuesta por un defensor de familia, un sicólogo, trabajador social, un nutricionista y un notificador.
La Ley de Infancia y Adolescencia tiene por finalidad garantizar a los niños, a las niñas y a los adolescentes su pleno y armonioso desarrollo para que crezcan en el seno de la familia y de la comunidad, en un ambiente de felicidad, amor y comprensión. Prevalecerá el reconocimiento a la igualdad y la dignidad humana, sin discriminación alguna, igualmente establecer normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes, garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los instrumentos internacionales de Derechos Humanos, en la Constitución Política y en las leyes, así como su restablecimiento. Dicha garantía y protección será obligación de la familia, la sociedad y el Estado.  










EN CONCLUSION
La falta de recursos para satisfacer las necesidades básicas de la familia dificulta extraordinariamente que los menores tengan acceso a la salud, educación y vivienda. Esta situación de pobreza ha hecho necesaria la inserción de los menores en el mercado de trabajo, para contribuir a la manutención de sus familias, con la consecuencia de verse privados de tener una educación escolar e incluso, muchas veces, de un hogar. Es ya muy trillado decirte que "en tus manos esta el cambio", pero esa frase es cierta siempre que "tu" alcances a identificar y sepas que te corresponde hacer en esta sociedad, que identifiques el papel que juegas y te involucres en la vida de tu familia, de tu país y de el mundo que te rodea y  así  brindar una mejor calidad de vida a todos los niños.
La unión hace la fuerza y la fuerza que necesitamos para cambiar este país esta en esa unión




2 comentarios:

  1. La mayor causa del maltrato infantil en Colombia es la pobreza, el conflicto armado y la falta de oportunidades laborales. Es importante que los padres no ignoren a sus hijos por pequeños que sean y tengan en cuenta sus opiniones, ideas y pensamientos. Al tener una buena conversación con los niños es probable tener control sobre sus comportamientos y que sepan diferenciar que esta bien y que esta mal. De esta manera no será necesario el uso de golpes o uso de palabras ofensivas. Pero para las personas de bajos recursos es difícil tener paciencia y tiempo para sus hijos por la preocupación de conseguir dinero. Es por esto que los padres del estrés que traen de sus trabajos pueden descargarlo en sus hijos.

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  2. bueno el maltrato infantil es algocon lo que se lidia a diario pero es porque quien aplica ese tipo de maltrato antes fue maltratado fisica o mental mente esto ocaciona problemas mentales y si de niño no le dijeron que eso estab aml el lo asumio como una buena accion por esopiensa que esta bn el maltrato y los golpes a los niños provienen de metodos de educacion y crianza en sus casas

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